Es la punta de Colombia y de Sudamérica. Su belleza es sinónimo de exuberancia en donde lo exótico predomina, ya sea en su parte costera, en sus inmensos desiertos o en su zona montañosa.
Sus playas, sus arenas, el color de sus aguas marítimas y esos tesoros escondidos lo convierten en un sitio turístico de excepción. Su población compuesta por la etnia Wayú, principalmente, raza indígena que conserva sus costumbres ancestrales, enriquecen su entorno.
La capital de la Guajira es Riohacha. Su población es de 335.000 habitantes, aproximadamente y tiene, tan solo, 13 municipios.
Aquí se siente el mar y el desierto, la nieve y la sal, el sol, el mundo árabe y el vallenato. Aquí habita una cultura que ha demostrado desde la colonia su espíritu indomable pero sonriente.